Fundamentalistas dicen que las vacunas del covid te “hacen” gay

Fundamentalistas de Irán, Israel y Estados Unidos dicen que las vacunas contra covid-19 provocan que la gente se “vuelva” homosexual.

El ayatolá Abbas Tabrizian, un clérigo de la ciudad de Qom, en Irán, compartió con sus más de 200 mil seguidores en Telegram que estos fármacos convierten a la gente en gay.

“No se acerquen a aquellos que se han puesto la vacuna de covid. Se han vuelto homosexuales”, advirtió el ayatolá.

Tabrizian se hace llamar el “Padre de la Medicina Islámica”, por lo que promueve la salud basada en la religión. 

Pero no es el único líder religioso que ha hecho este argumento.

A inicios de año, el rabino ultraortodoxo Daniel Asor le comentó a sus seguidores que la vacuna tiene “sustratos de embriones” que podrían “causar tendencias opuestas”.

Además de provocar la homosexualidad, el rabino le dijo a los judíos que no se pongan la vacuna porque creará “un nuevo orden mundial”. 

Estas teorías de la conspiración de Medio Oriente han viajado a Estados Unidos, donde las replica el grupo de ultraderecha QAnon, que cree que Donald Trump es su salvador.

Two of the biggest QAnon channels on Telegram, with 180,000 and 56,000 subscribers respectively, have endorsed the baseless conspiracy theory that vaccinating children increases the probablity of them identifying as homosexual or transgender at a later stage. pic.twitter.com/42O62TFTjm

— Shayan Sardarizadeh (@Shayan86) February 10, 2021

Estos ultraconservadores estadounidenses han aceptado los argumentos del ayatolá y en sus redes están esparciendo el mito de que las vacunas contienen genes que vuelven a los niños en homosexuales y trans.

“Esta es la razón por la que tenemos confusión de género entre nuestros jóvenes. Investiguen cómo ponen hormonas y alteran el ADN de las vacunas”, advierte una publicación que circula entre los seguidores de QAnon.

Aunque los argumentos son ridículos, estas teorías muestran lo fácil que se esparce la desinformación en las redes sociales.

Por un lado, están fomentando la idea que la identidad de género y la orientación sexual no son características natas de una persona, sino que la provocan “hormonas” o “medicamentos” externos.

Y por el otro, están alimentado el miedo irracional a la vacuna de covid-19, que ha causado casi 2.5 millones de muertes en el mundo.